Rober Puyal / Sport Auto (enero 2021)
Porsche no es precisamente la marca más fecunda en lo referente a «concept cars». Casi siempre, son máquinas realistas, próximas a los modelos de serie, las que sirven de animaciones inéditas en sus stands. ¿Quién hubiera creído que el equipo de diseñadores crease, casi a ritmo continuo, tales prototipos esencialmente espectaculares sin mostrarlos jamás? Michael Mauer, jefe de diseño desde 2004, nos sorprendió con este regalo de Navidad, una avalancha de bellezas inéditas creadas a lo largo de los años.
¿Por qué ahora? ¿Se trata de una repentina necesidad de proporcionar alegría en estos tiempos sombríos, o de mostrar el lado fundamentalmente deportivo de una marca que en la actualidad vive sobre todo de sus SUV?
De hecho, Michael Mauer, desvelando esta serie de trabajos finalmente publicados en un libro, Porsche Unseen, recompensa a los artistas frustrados de ver sus obras de arte cubriéndose de polvo en la penumbra. Según él, este tesoro se constituye sobre todo con la intención de distraer a sus tropas y… ¡no dejar pasar la creatividad de sus diseñadores!
En definitiva, «concept cars» de uso interno, incluso si a veces se adivina en las máquinas conservadas y ahora aquí mostradas el eco de encargos muy tangibles. Mauer comenta: «Para un diseñador, no hay nada tan excitante como construir el futuro de Porsche». Mientras los diseñadores desarrollan el presente, trabajan en proyectos futuros. Hay algunos sólidos y otros francamente malditos, fugaces, fantásticos…
De esta forma, los «Vission» de Porsche trastocan el tiempo. Tomemos un momento para descubrir algunos de estos «futuros del pasado» mantenidos en hibernación y… soñemos.
919 Street (2017) – La cara oculta de la Luna
La razón de ser de las 24 Horas de Le Mans, el objetivo y la divisa de sus primeros organizadores era la mejora de la raza automovilística. Pero rápidamente alguna cosa no funcionó bien y los Ferrari Testa Rossa, Jaguar D o incluso los Maserati Birdcage se apartaron muy pronto de un posible uso en carretera. Con mayor motivo aún, los autos más recientes, tan radicales como los F1, son casi tan incapaces como aquellos de dejar el circuito, a pesar de sus dos plazas. Por tanto, la tentación es siempre desarrollar una versión «stradale». En ese sentido, vimos algunos 917 intentar el desafío a nivel puramente privado, conocimos el episodio del 962 Dauer, o también la versión carretera del 911 GT1 de motor central, cuya existencia era exigida por el reglamento oficial de la FIA.
Mientras que el 919 de carrera triunfaba tres veces en la pista de Le Mans y en el Campeonato Mundial de Resistencia (2015, 2016 y 2017). Michael Mauer hacía trabajar a su equipo en esta sublime versión de carretera de 900 CV. Todo está ahí, desde su silueta de catamarán hasta sus pasos de ruedas, tan ajustados que impiden casi cualquier oscilación de suspensión, pasando por la cresta iroquesa, principio aerodinámico sin el cual las máquinas LMP no saben vivir.
Pero al descubrirle sin número en sus puertas, con sus cristales tintados y todos los accesorios de un gran GT, irremediablemente, nuestros sueños comienzan a subir de vueltas (lo que los ingleses llaman «revs»). A pesar de ello, por deseable que sea, este auto era tan poco viable como los tremendamente incómodos GT1; por ejemplo, los ingenieros no veían de manera de hacer arrancar el motor sin su presencia y en menos de… 45 minutos ¡Adiós al 919 Street!
904 Living Legend (2013) – Capítulo inacabado «post-scriptum»
Doble intención, sin duda, detrás de este prototipo aéreo, ligero, sublime… Honrar a Butzi, también conocido bajo el nombre de «FAP», Ferdinand Alexander Porsche, el hijo diseñador de Ferry, quien firmó el 911 y también el 904, auto sin verdadera descendencia técnica ni estilística. Y dar otra interpretación del cuaderno de cargas Volkswagen para la berlinetta «un litro a los cien kilómetros», que finalmente fue comercializada en el año 2014 bajo el nombre de Volkswagen XL1.
El Porsche 904 Living Legend retoma la motorización del XL1 Sport Concept, no ya animado por un motor híbrido, si no por un bicilíndrico en V Ducati de 1.200 cm3 de 200 CV.
Del lado de su estilo, dos características del 904, primer Porsche en polyester que fascinó a los diseñadores modernos: de una parte su casco «bilvalvo», evocado al nivel de su parte voladiza delantera. De otra parte, la conexión flexible entre el capot trasero y sus flancos. Ambas dan una interpretación moderna de su expresión y, a la vez, incisiva y amigable.
Pero el Volkswagen XL1 no tuvo un éxito que permitiera considerar esta versión Porsche por mucho tiempo.
917 Living Legend (2013) – Honor a los vencedores
Los prototipos de competición, tanto de Porsche como de otras marcas, a menudo han quedado grabados de por vida en la retina de los aficionados. No solamente porque pasaban muy rápido, si no porque, incluso parados, presentaban gran belleza de líneas. Hay algo que exaspera a un diseñador, cuando sabe que el éxito de sus autos se debe más que nada al análisis técnico de un ingeniero corregido por el túnel del viento. ¿Quién diseño pues el 917, posiblemente el más bello de los Porsche? Para hablar correctamente… nadie.
Cuarenta y tres años más tarde, este Living Legend retoma la decoración del auto victorioso en Le Mans en 1970 (primera de las diecinueve victorias de Porsche) y, sobre todo, esa forma de mango de grapadora con su parte trasera («cul» en el texto original) elevada y sus flancos cayendo hacia la pronunciada ondulación de las ruedas delanteras. Pero la trasera de origen, tan fascinante con sus ruedas desnudas, es sustituida por un simple trampantojo en pintura negra mate.
Para una producción en «serie», resultaría muy difícil retomar uno de sus rasgos característicos: su estrechísimo techo ovalado. Aunque es cierto que en Pagani con su modelo Zonda lo consiguieron medianamente bien, en el 917 Living Legend un cambio de proporciones podría poner en peligro la frágil belleza de esta reedición.
Vission Renndienst (2018) – Servicio competición
Abrid bien los ojos… ¡una camioneta en las páginas de Sport Auto!
Existe una intensa discusión interna en la redacción, unos no comprenden del todo el culto de la Combi Volkswagen (ni que alguna, muy bien conservada, pueda llegar a costar actualmente más de 100.000 €); otros, por el contrario, convencidos de que si dispusieran algún día de esa suma, se harían voluntariamente con una (después de 6 Ferrari, 3 Aston y 1 Lotus en su garaje, evidentemente).
En el caso de que Porsche fabricara una furgoneta, podría parecerse a esta. Michael Mauer disfrutó dando trabajo a sus tropas, ya que ama el deporte (circula en GT3), pero no olvida que fue el que creó para Mercedes,… ¡la Vito!
La «revival» de la Combi consigue cambiarlo todo, pero manteniéndose claramente identificable como su descendiente directa, digamos su biznieta. ¿Bonita? ¿Ridícula? Es lo que podemos ver. Pero la unión de esta Vission Renndienst («servicio competición» en alemán) remolcando el 917 Living Legend, visto anteriormente, sería sorprendente ¿no?
Por tanto, de todos los «vission» reunidos aquí, esta súper-Combi es probablemente la menos probable de alcanzar la frontera de lo real.
911 Vission Safari (2012) – Su Eminencia
Un 911 alto… ¡el viejo Grial! En Porsche, el Safari, el East Africain Safari exactamente, marca un fracaso; se trata del único rallye del campeonato del mundo en el que la marca jamás consiguió imponerse.
Para los diseñadores, el trabajo estilístico es limitado ya que el auto ha de derivar razonablemente, al menor coste, del 911 del momento, Type 997. Conservan incluso lo accesorio: viseras negras que camuflan la antiestética distancia entre el ala y la rueda, escudo compacto frontal que juega el papel de parachoques, focos de «galería» del techo. Interesante juego también con el simbólico color del patrocinador principal de la época, Martini, que se ha conservado y que ha quedado, junto con los cigarrillos Rothmans y la petrolera Gulf, como uno de los símbolos emblemáticos que han decorado los Porsche de competición.
El alcohol no forma parte aún de los grandes tabús modernos, como el tabaco y la gasolina, pero puede ser que pronto se una a ellos, con lo que el 911 Vission Safari se convertirá entonces en símbolo feroz de una época ya pasada. En todo caso, este eslabón entre los Porsche «base» y los SUV podría surgir uno de estos días, para lo que los diseñadores, como puede verse, están ya preparados.
906 Targa Florio (2015) – El canto siciliano
El futuro se alimenta de las referencias al pasado. Esta es una constante, una marcada tendencia y una necesidad. A la vez, es una manera cómoda de silenciar y devaluar a sus adversarios coreanos y chinos que ofician recientemente como concurrentes, recordándoles que pocos constructores tienen el pedigree de Porsche para ilustrarle y defenderle, como aquellas grandes victorias del 906 en la Targa Florio de Sicilia.
El 906, en búsqueda de una finura optimizada, añadía su máxima reducción de altura en detrimento de la distancia al suelo. Con ello, se descubría la importancia del apoyo como precaución para no despegar del suelo, pero también el secreto para… ¡pasar más rápido por las curvas!
Este Living Legend retoma el capot delantero hundido como la hoja de una garlopa entre sus protuberantes alas, que súbitamente se elevan. Otra novedad de aquel tiempo, la aparición de colores en los autos; por lo que el diseñador 2015 redescubre aquella incipiente tendencia y la mantiene; si bien su morro naranja hace pensar más en los primitivos 908, pero el espíritu está ahí. Por el contrario, sus llantas puramente modernas y perfectamente integradas, ya que se trata de sorprender en un stand, deben producir cierto vértigo cuando giran.
Vission Spyder Little Rebel (2019) – Honor a los caídos
En la carretera de Salinas, es decir, en alguna parte entre Mulholland Drive, donde se entrenaba, y Monterey, donde iba a disputar una carrera, el bello James Dean paseaba su «Little Bastard», el Porsche 550 que acabada de adquirir con las ganancias obtenidas en su última película. Rebelde sin causa (Rebel without a Cause), para reemplazar el 356 Spyder que habían despertado en él los placeres del pilotaje. En un cruce casi desierto, un lento y pesado Ford Custom Tudor bloqueaba la carrera y terminaba con su carrera de actor y de piloto. Sesenta y cuatro más tarde, Jimmy sigue estando presente y el accidente no se ha borrado aún de la memoria colectiva.
Los diseñadores de Michael Mauer piensan que aquel trágico suceso forma también parte de la leyenda de Porsche y no han dudado en jugar con los símbolos, añadiendo una unidad al mítico número de carrera e incluso bautizando al modelo en la parte inferior de la carrocería como «551«. Pero, mientras que el 550 era redondo como una bañera de aluminio, este concept car asume ciertas aristas. Sin embargo, algunos elementos sutiles permanecen tanto en sus proporciones, como en las bases del arco carenadas y el corto parabrisas que no hacen más que reavivarlo.
Presentado el año pasado, este ejercicio de estilo no ha tenido aún tiempo de incorporarse a la gama, pero no sería una sorpresa que el sustituto de la gama Boxter/Cayman se pareciera bastante, ni que integrase una versión muy radical en el espíritu del Speedster respecto al 911 cabriolet clásico. En ese caso, recordaríamos haberlo conocido con algunos años de ventaja. En revancha, parece dudoso que los comerciales de la marca permitan mantener una alusión tan directa a un suceso realmente lúgubre.
(Traducción de Santiago Criado)